Ahora que lo entiendo, me pregunto: ¿cómo hacer llegar este mensaje a las personas?, si cuando se habla de enfermedad, se insiste que el peso y la actividad física son la causa principal de la enfermedad, y se habla de dietas para mejorar una condición de salud. Sin embargo, una dieta no va al origen de la enfermedad y tampoco es una solución definitiva, ya que es temporal. Y por esto, para muchos, es difícil creer que es posible cuidarse a largo plazo. Para otras personas, en ausencia de enfermedad, existe un deseo por bajar de peso, y lo entiendo, porque ese deseo también viene de la presión social, mercadeo, valores sociales y el entorno en el que vivimos.
De hecho, no intentaré convencerte de que tienes que adelzar para sentirte mejor contigo mismo o para mejorar una enfermedad, pero si te puedo ayudar y acompañar en las acciones que puedes hacer y como hacer para tener una mejor alimentación, no desde la restricción alimentaria, evadir comidas o hacer ejercicio como castigo. Lo haré desde una mirada mas amplia y completa de la salud de la persona, su entorno y su alimentación.
Permiteme acompañarte. El proceso de transformación es continuo. Lo perfecto es enemigo de lo bueno.